La contratación es una habilidad clave para el crecimiento de la empresa. Sin embargo, hay ciertos mitos que rodean este proceso.
Uno de los procesos más comunes en cualquier empresa es el de la contratación. Sin embargo, el proceso no es tan simple como levantar el teléfono y traer a alguien, o contratar a diez personas porque sí. Construir una empresa es un verdadero arte, y la contratación requiere de criterio, destreza y visión de futuro.
Por eso también es importante encontrar el asesoramiento justo y saber en qué etapa está tu empresa. Si estás creciendo, mejor prestar atención a cada contratación. Si vamos a los hechos, hay ciertos mitos que rodean este proceso, por lo que conviene despejarlos antes de que se conviertan en errores.
Los mitos de la contratación en empresas
Si tengo más gente, puedo hacer más cosas
Es uno de los mitos más conocidos. Muchos founders cometen el error de traer empleados para cada nueva función que desean, para cada problema que tienen y hasta para alcanzar más rápidamente la rentabilidad. Es que, además, suena bien. Los founders creen que los inversores estarán más impresionados si la empresa tiene más empleados, casi como si fuera un marcador de progreso. Es como una charla con un amigo que pregunta por la compañía. “Como cien empleados, así que debe ir muy bien”, es una respuesta muy posible, pero incorrecta.
Los fundadores ya establecidos o quienes lo hacen con una segunda empresa aconsejan todo lo contrario: si podés lograr algo con menos gente, mejor.
Si yo fundé la compañía, sé a quién contratar
No siempre el founder es el que mejor sabe gestionar la contratación y liderar a las personas. A veces, tener la dirección de una empresa y estar 100% internado en sus problemas juega en contra. Intentá detectar lo antes posible si tenés o no esa habilidad para no cometer errores en etapas tempranas.
Si un talento está libre, debo contratarlo
“Debería contratar a esa persona porque está disponible”, es una gran mentira y una gran trampa en la que caen algunos founders. En realidad, esas prácticas pueden llevarse a cabo en empresas muy grandes que ya alcanzaron el product market fit, pero no en startups que, como lo dice su nombre, están recién empezando. Esa contratación debe darse solo si la persona puede cubrir un puesto que la empresa no tiene o cumplir una función que nadie más puede.
Una empresa necesita un equipo exacto de ejecutivos
Quizás en las empresas exitosas existe un equipo directivo con títulos como CEO, CFO, CPO, CMO y más títulos como esos. Entonces las startups más pequeñas deciden contratar personas para cumplir esos cargos, pero únicamente por el valor del título. Pero, lo ideal antes de llenar el plantel es alcanzar el product market fit primero.
Quien lideró primero un área sabe cómo resolver sus problemas
El fundador de Twitch (antes Justin TV), Michael Seibel, contó que un hombre llamado Kyle fue quien diseñó el sistema de video. Sin embargo, esa área empezó a gastar demasiado dinero y nadie podía resolverlo.
Entonces contrataron a otra persona que había trabajado en YouTube. Y fue ese hombre quien les enseñó cómo ahorrar en el ancho de banda, qué era el peering y muchas cosas más. Pero lo más importante fue que les hizo ver que a nadie le importaba ver video en su producto. Y así fue que Twitch se convirtió en lo que es hoy, gracias a alguien que no fue el primero que trabajó en ese área. Los especialistas pueden ahorrar a la empresa un montón de dinero.
