Martín Migoya, CEO de Globant, explicó cómo hizo su compañía para ser lo que es hoy, y a qué se apegó para no perder su horizonte.
Argentina es un terreno fértil para emprendedores. No solo es uno de los países con más unicornios de América Latina, sino que cuenta con cientos de empresas que avanzan a paso firme y miles de jóvenes con sueños de emprender.
Así se ve cada año en las Experiencias Endeavor donde miles de personas asisten para escuchar a los máximos referentes del emprendedorismo, como por ejemplo Martín Migoya, CEO y cofundador de Globant. En esta oportunidad, Migoya revela una serie de valores para tener en cuenta a la hora de empezar el camino emprendedor.
Capacidad de (des)aprender
No es talento, no es inteligencia: es una habilidad completamente distinta. La duración promedio de los contenidos a nivel mundial es de 18 meses. Hay que aprender todos los días, pero también desaprender: aquello que se hacía de una manera, debe dejarse y reinventarse.
Autonomía
Es el poder hacer lo que uno tiene ganas, sin que nadie lo controle, siempre y cuando siga la misión mayor. Y es también una de las grandes motivaciones del ser humano.
Para que una gran empresa pueda escalar, es fundamental que los equipos tengan autonomía: que puedan desarrollarse, tomar decisiones y hacer que las cosas pasen.
Resiliencia
El poder caer, levantarse y resurgir de las cenizas es sinónimo de éxito, tanto a nivel de individuos como de organizaciones.
Autenticidad
Hoy en día la Inteligencia Artificial es como el vapor de la Revolución Industrial, pero para la mente. La gente ya la adoptó, y las empresas van a empezar a hacerlo. La pregunta es: ¿quién va a hacer algo distinto? Porque todo lo que hace la IA es un gris, y es el ser humano quien le imprime la autenticidad.
La gente se abraza a la autenticidad, y es ella la que conecta a los humanos y hace que los productos sean inolvidables.
Emprender con propósito
Entender qué estás haciendo es mucho más importante que la parte económica. Lo primordial es saber cuál es el impacto que uno está generando. Obviamente, ese impacto tiene que estar respaldado por algo sólido porque, si no, no se puede seguir reinvirtiendo para seguir viviendo. El impacto es ese algo que se proyecta mucho más allá de la compañía.
Te puede interesar: Qué es emprender con impacto
Pensar en grande
Las adversidades no deben volverse un obstáculo, y nunca hay que pensar por anticipado que algo no sirve. Globant logró ser sponsor del Mundial 2022 tres semanas antes de que empezara el evento, y lo pagó con servicios en vez de con dinero.
Nada de eso podría haberse logrado si en la previa pensaran: “queda poco tiempo, es imposible” o “hay que pagar demasiado dinero”.